
El Rojo irá un busca de una victoria que le devuelva la sonrisa y le de tranquilidad de cara a lo que viene, ya que hoy estaría jugando por permanecer en la categoría. El partido de esta noche, ante uno de los punteros, marcará el retome, iniciando las revanchas. En el primer cruce entre los dirigidos por Martín Amden y el cuadro de San Salvador, fue este último el que se impuso por 69 a 64. Por lo tanto, ante un eventual empate en puntos al culminar esta fase, al los uruguayenses les convendría imponerse por más de cinco puntos.
Pero a Rocamora le cuesta mucho ganar. En lo mayoría de los casos, no supo como ganarlos y perdió por esto, y no por debilidad defensiva, todo lo contrario, en ese aspecto hacen muy bien los deberes. La asignatura pendiente es el ataque. El Rojo no le encuentra la vuelta a las ofensivas, corre poco de contra, no elige las mejores opciones, y hasta se pone nervioso y sin poder de decisión a la hora de tirar. Es por esto que lleva dos triunfos y cuatro derrotas.
Enfrente tendrá a un equipo debutante que llega inspirado, que se mantuvo en la cima más allá de haber quedado libre, cumpliendo un muy buen papel promediado esta primera etapa de grupo. Tienen los mismos números que Rocamora, pero invertidos: lleva cuatro pleitos ganadas y dos perdidos.
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