
Lo sufrió en el primer tiempo, lo peleó, lo pelearon los dos, jugando mal pero metiendo en toda la cancha. Sobre el final de esa primera parte, Regatas logró quebrar el tablero, volcándolo a su favor para que ya Atlético Tala no lo alcance más, mientras desde las tribunas celestes bajaba el “vamos a ascender”. Así, sufriendo, peleando, el equipo uruguayense buscaba cerrar la serie y esperar al lunes para saber quien será el rival, para saber si deberá viajar a Colón o a Paraná, para definir con La Unión o con Olimpia, acaso los dos rivales más poderosos de esta Liga. Pero como aquel 8 de abril, Atlético Tala se quedaría con la victoria en el Garro.
El primer tiempo terminó con un exiguo 29 a 27 a favor del celeste local, dejando también al descubierto la mediocridad del encuentro y la supremacía de la marca por el juego. Es que así fue todo el encuentro.
Los últimos 20 finales fueron a toda emoción, con Tala pasando arriba en el marcador, envolviendo al Garro en un nerviosismo que ya bajaba desde las tribunas y contagiaba a los jugadores. La visita, Tala, disfrutaba de una ventaja de seis puntos a cinco de terminar el partido y todo se encaminaba al quinto partido de mañana, ya en Tala, para definir el pase. Y el final llegó así, con la visita festejando, sacando provecho de los innumerables errores de su rival, que tiró apurado en los momentos clave, en esos donde se definen los encuentros. Tala se tranquilizó en el final y gracias a eso se quedó con una victoria que buscó desde el inicio del encuentro. Correcto arbitraje de Javier Mendoza, Diego Aguilar y Daniel Ortiz. Mañana, en Tala, desde las 21.30, se definirá la historia.
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